"Que la Madonna nos ayude en esta nueva etapa de peregrinaje” 24/07/2013

Por Patricia Gorocito

No buscamos un sentido, como la religión, pero el síntoma es nuestra pequeña brújula para ubicar el goce singular que habita en cada sujeto más allá del padre

“Que la Madonna nos ayude en esta nueva etapa de peregrinaje”. Así dijo el papa Francisco antes de partir a Brasil.

Lacan habla del triunfo de la religión. En este texto le preguntan a Lacan ¿Hay algo que no sea un acto de fe?”

Los psicoanalistas decimos que creemos en el síntoma.

Interesante hoy poder interrogarnos por nuestras creencias.

De más está decir que veo muchos creyentes en nuestro ambiente. Algunos creen en la infatuación de su pequeño yo. Generalmente aquellos que dicen ser ateos y están en contra de la religión. Otros dicen: Dios ha muerto y se ubican también en un lugar de creyentes.

¿Y la feminización del mundo no es creer en la posición femenina? “…Que la madonna nos ayude en esta nueva etapa de peregrinaje”, bien podríamos decir los y las psicoanalistas sin brújula del siglo XXI.

Y ya sabemos que los varones ubicados en la posición masculina creen en una mujer.

Y los analizantes y analistas creemos en el síntoma que no es lo mismo que creerle al síntoma, diría Lacan.

Hoy en día, más allá del complejo de Edipo, seguimos la lectura del último Lacan.

No buscamos un sentido, como la religión, pero el síntoma es nuestra pequeña brújula para ubicar el goce singular que habita en cada sujeto más allá del padre.

En El triunfo de la religión Jacques Lacan pronostica que la religión es el complemento perfecto de la ciencia.

Y Jacques Alain Miller nos dice en su conferencia del 26 de abril de 2012 en Buenos Aires que el capitalismo y la ciencia combinados han hecho desaparecer la naturaleza.

Y la religión todavía insiste en proteger un orden natural. Aunque lo real se escapó hace rato de la naturaleza.

Dice Jacques Alain Miller en esa misma conferencia que Lacan pensaba que la iglesia al luchar por esa causa perdida, defender un orden natural y hacer equivaler lo real con la naturaleza, iba a triunfar.

Pero lo real está donde no lo encuentran ni la ciencia ni la religión. Mejor para los católicos, pues la verdadera religión, la romana, es experta en encontrar sentido dice Lacan. Y lo real es sin sentido. Aunque la ciencia tiene certeza.

Entonces en estos tiempos que corren  podríamos pensar que  el psicoanálisis se ocupa de un real que es el inconciente y se lo encuentra por sorpresa y se lo sostiene con invención y coraje diría Jorge Forbes.

Es un real que es un resto que ni a la racionalidad de la ciencia ni a la espiritualidad de la religión le interesa.

El psicoanálisis apunta a lo real del síntoma, no busca el sentido religioso, apunta al goce singular de cada analizante.

Aunque algunos analistas nos parecen religiosos, no todos lo son.

Mejor, seguimos la próxima.

Patricia Gorocito é psicanalista e professora da Faculdade de Psicologia da Universidade de Buenos Aires, na Argentina